viernes, 21 de febrero de 2014

EL BOTE




El Bote.
La barca y la vida
mecièndose lenta
en el ondular crital
de las aguas.
Azules remolinos de
espumas dentadas.
El mar...y su sonido.
El lamento de la vida viene, và
en su vaivèn rìtmico y serpenteante.
Movièndose candencioso,
Trasladàndose lento.
La Barca.
El bote, la vida.
Quieta en las ondas lìquidas.
Arrebolado bajo las nubes ardientes.
Cobijado en las noches de espera.
Sube...sube el viento las colinas.
Silba, canta por entre los senderos.
Viaja entre las hojas
de las humedades de Otoño.
Un lunar de luz en las praderas.
Un lamento de la noche entre las ramas.
El Bote.
La Barca.
La Vida.
Galopante y contìnua.
Tumultuosa y desprovista.
Soles que marchan la ribera.
Lluvias que calzan los pies dormidos
de la aurora.
Relàmpagos que hieren las sombras.
Respiraciòn salina.
Fuerte ventarròn que cruza el Puerto.
Voraz marejada que la luna ilumina.
Viento, barca, pez y caracola.
La barca rota, la vida,
la madera desmelenada entre
las rocas.



Con Derechos de Autor,inscrito
en Santiago de Chile 2014



jueves, 20 de febrero de 2014

DECIR GRACIAS

DECIR GRACIAS


Las Flores.
Las flores de mi vestido
hoy vuelan al viento
y el sol hace
un abanico de ambar
sobre las olas marinas.
Quisiera caer...caer
al blando y verde cèsped.
Abrir los brazos
y mirar al cielo
de nubes rosadas de algodòn
y terciopelo,
y entre mis ojos que bajan
ràfagas de làgrimas azules
decir Gacias...decir gracias.




Con Derechos de Autor, inscrito en Santiago de Chile 2014.-


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PALOMAS PERDIDAS

PALOMAS PERDIDAS



 Tristeza...
¿cuando vienes y cuando
viajas por el aire
que no te veo ?
Y repicas en mi oìdo
como bruñida campana.
Quisiera en la luna roja
alzarme y subir
al encuentro
de las nubes escarlata.
Refugiarme ahì
hecha un ovillo de seda
y de mariposa,
acunada en tus
brazos selenitas,
arropada en el abrigo
de tu noche clara.
Luna...
que no develas misterios,
que callas, que transitas frìa
y peregrina
la sombra,
llena de fantasmas estelares.
Y me quedo quieta,
mirando al cielo negro
de estrellas infinitas.
Demudada ante la belleza
del Cosmos y sus vuelos
de lechoso camino en
la galaxia.
Soprendida del rìo que atraviesa
la explociòn marfilada
de pulverizadas y muertas
flores blancas, estampadas
en la tela amplia del firmamento.
¡Cuanto camino insondable !
¡Cuànta tristeza !
¡Cuànto amor se desborda!
de las venas de mis aguas,
para parar en el mar,
donde no llegaron hoy
las perdidas y àgiles palomas
de verdes ojos
en sus cuencas asustadas





Con derechos de autor, Santiago de Chile 2014.-

martes, 11 de febrero de 2014

MUNDO VIRTUAL

Este mundo es sumamente virtual, irreal, casi perfecto.Aquì ponemos nuestros sueños, ilusiones, alegrìas, comentarios.Tambièn nuestra rebeldìa en frases por ahì que encontramos tremendamente acertivas, y lo son. Intentamos tener relaciones felices con la gente, mostramos quizàs lo mejor de nosotros mismos y tambièn podemos ser como yo, muchas veces contestatarios, y somos considerados la mayorìa como "polèmicos " por el solo hecho de tener opiniòn y por lo general opuesta a la mayorìa, donde corren todos con un cordel como de ovejas todas juntas...siempre hay alguien que se sale del camino y es bueno, en la diversidad està la busqueda de la verdad.Tambièn este mundo es de egocentrismos.Y me he percatado que es por esa gratificaciòn inmediata que necesitamos, sentirnos valorados, importantes. Tambièn he visto que hay una inmensa carestìa de amor y digo de amor real Universal que nada tiene que ver con las pasiones mundanas. El ser humano està vacìo y busca, siempre buscamos parecerle bien a este o aquel, que nos consideren, ser parte de algo o de un todo, mezclarnos y amalgamarnos en la corriente masiva, y el que se sale del sendero...ya es loco, tonto, pobre de espìritu. Lo metemos en el mote de "Fome" "Aburrido " o "Amargado ".Podemos ser felices o medianamete felices en este medio que lo màs que tiene es "entretenernos ", pero dista mucho de relaciones de amor concretas y reales. Aquì es pura fantasìa y lo he aprendido a golpe de caìdas infantiles.Como soy ;no dirìa yo ingenua ni tonta, pero si emotiva y sensible, crèdula porque no tengo maldad en el corazòn, limpia porque no ando tirando mala onda a nadie y porque tampoco le deseo mal a nadie, discreta, porque no murmuro de èste o aquel, porque no ando de comidillas, porque nunca nadie me enseñò el odio, la amargura o la mala leche y la mala vibra...Pero una cosa...hay gente que cree que por decir bonitas palabras, frases de conquista una se và a deshacer entera y seguir la corriente en un juego tonto y estèril...la vida enseña, hace que aprendamos, que nos pongamos màs cautos, màs prudentes, màs recelosos, que nos situemos con los pies bien en la tierra y agradezco las lecciones, agradezco mucho que me pasen cosas y me hagan ver que no todo lo que brilla es oro y que no todo es bueno y que hay mucho desechable en el camino.Que hay que discriminar ( en el buen sentido de la palabra ) ser inteligente, usar la inteligencia, la sabidurìa, el discernimiento, separar las aguas, podar, desmalezar. Algunas personas se enojan conmigo porque no escuchan de mì  boca y lo peor de mi corazòn lo que su fantasìa quisiera escuchar, entonces me borran, me eliminan y lo considero extraordinario, me quitan la carga, me aligeran el peso.La equivocada no soy yo. No me puedo hacer cargo de un tipo loco que me dice que me ama, que le gusto, que me lo repite 30 veces como loro,eso me asusta, me incomoda, es raro.Gente que nì conozco, que he aceptado sòlo por buena onda o porque algo me ha hecho "confiar".Entonces a esas personas no sòlo las elimino, sino tambièn las bloqueo. Todo es un aprendizaje, a veces forzoso.Mi gran falla e ser confiada, porque creo creo que todos piensan igual que yo.Me dicen que soy "dulce"...si talvez lo soy. Veo la vida muy hermosa, color de rosa a veces,desde un prisma de muchas ilusiones y sueños, me gusta volar, divagar, imaginar...imaginar...tengo mucha sensibilidad e intuiciòn, de lo contrario nunca podrìa haber hecho poesìa si viera todo feo, todo malo y todo oscuro, pero eso no significa que soy una pobre mujer manejable y sin caracter. Lo que màs tengo es caràcter y la mayorìa de las veces tengo que contar hasta mil para que no se me salgan los enanos malditos. Soy rebelde, muy rebelde lo he sido desde siempre y desde niña, toda mi vida.Soy autoreferente al màximo y tambièn egòlatra, pero nunca tonta, me hago muchas veces la tonta para que las cosas pasen piola y porque a veces ni siquiera me dà la gana discutir.
Todo esto lo he escrito porque si me molestè de que un Señor creyendo que me decìa las maravillas màs extraordinarias que le pueden decir a una mujer,  iba a "pisar el palito" y salir corriendo como una calcetinera de 15 años, tras èl. Nunca he sido mujer que me crea a piè juntillas los piropos, ni siquiera me son muy importantes. Obvio que me gusta còmo fèmina que me digan cosas gratas...obvio ¡a que mujer nò ! Serìa muy falsa e hipòcrita si lo desmintiera.
Tuve dos caìdas horrendas por acà por este medio, de las cuales no me arrepiento porque dì lo mejor de mì, porque creì y confiè, porque me las juguè, porque pensè que eran personas claras y honestas, porque incluso a una la conocìa hace muchìsimos años, pero habìa pasado mucha agua bajo el puente, era otra persona que la que conocì, la que imaginè o la que quise imaginar. Tambièn en la soledad y la carencia afectiva se producen este tipo de cosas.O bien porque uno està debilitada y no cree mucho en si misma. Crees encontrar, crees que llegò tu hora, pero no era. Y no es que salga como loca por la vida a buscar compañìa, son momentos que se dieron y los tomè nada màs como para darme una oportunidad, porque estaba siendo mezquina conmigo misma...pensè " Quizàs "..."Puede ser, porquè no "
La vida me ha enseñado muchas cosas y hoy puedo elejir y exijir y por sobre todas las cosas, en las cuestiones del amor...las condiciones las pongo yo.
Doy gracias infinitas a Dios...sì a Dios, que me enseña el camino y es el Ser Supremo del que nunca me avergonzarè.Me avergonzarè de los hombres, nunca de Dios. De decir, de confirmar que sin èl "Nada Soy " y que bajo su amparo nunca me podrè equivocar.

domingo, 9 de febrero de 2014

DESIERTO FEBRIL

DESIERTO FEBRIL De: Ingrid Pereira Mesecke, Febrero 8 de 2014, Chile.-

9 de febrero de 2014 a la(s) 12:28
Prudencio Alvear se sentò con los ojos chiquititos, semicerrados, buscando la lejanìa del horizonte, que despuntaba con un sol de rayos amarillos entre nubes rosadas y pàlidas.
Tenìa los ojos grises como un agua de charcos de invierno y arrugas por todas partes que poblaban su cara otrora de facciones finas, quizàs hermosas.
Solo, como una piedra en el camino, como un desierto arriba en las salitreras...sòlo...porque su vida de ermitaño le quedaba bien y la habìa elegido.
Ya no habìa nadie màs que èl en Humberstone.El salitre le gustaba, màs bien lo que contaban sobre el  salitre en el tiempo màs pudiente de la historia, con sus villas y sus casas, las pulperìas y sus fichas de compra, los grandes salones y el baile, la ropa, los muebles, los espejos, traìdos del extranjero.
Por una extraña razòn el minero del cobre, sentìase felìz en ese pueblo fantasma.
Nada màs habìa cruzado la pampa, la Industria Alemana con el salitre sintètico y hasta ahì habìa llegado la pompa y los lujos de una sociedad con Compañìas foràneas que les daban el sustento a los hombres de la costra desèrtica en la altura.
Pese a que Prudencio Alvear era el tìpico hombre de aspecto arcilloso, sumergido en las fauces subterràneas , trepanador del cobre, sentìa una alucinante atracciòn por las salitreras y decidiò sin màs ni màs, establecerse ahì.
De cuando en cuando bajaba al pueblo màs cercano, a abastecerse de un poco de harina, trigo mote, sal ,manteca, azùcar, cafè mate y algunas hierbas,tabaco, cerillas,papas, frejoles, arroz y carne deshidratada que colgaba en los maderos del zaguàn. El agua era lo màs escazo en esa zona, por lo tanto servìase de un gran tambor que llenaba con algùn camiòn cisterna que de tarde en tarde hacìa una inspecciòn del lugar y le traìa el apreciado liquido para poder subsistir.Asì se aprovisionaba de algunos vìveres, aprovechando las bajadas del cisterna.Todos lo conocìan en el Pueblo...todos...como: " El Viejo Loco "
Hijos, muchos que deambulan de aquì para allà por los pueblos calicheros del norte.Ya crecidos buscaron sus destinos, hombres màs ambiciosos que su buen padre; y por esposa una buena mujer que habìa partido desde hacia tiempos eternos.
Las manos cruzadas y en silencio, la piel morena, curtida por los vientos y las sales del norte, la mirada perdida en el tiempo y el espacio.Los recuerdos, las nostalgias invorrables de aquella magnìfica historia de su vida, atada a laberintos existenciales, a tanta fuerza y coraje, a tanto tiempo y esfuerzo, para ganarse el pan en las minas que vomitaban el cobre y en los suelos que regalaban el yodo.
Habìa sido joven, claro, hermoso y alto, delgado como un espantapàjarros de la sierra, alzado allà en las tierras de Mamiña, entre los guanacos, con el viento siempre en la cara que hacìa que sus làgrimas cayeran sin pena, que borbotearan por las mejillas, que se deslizaran lentas por la superficie bronceada de la piel, nada de penas, y si las habìa se las tragaba con un sorbo de cafè, con una pipa y tabaco rubio, para seguir urdiendo la vida, de a pedazos, retazos, pero el puzzle al final del dìa siempre se armaba completo.
Panes en la ceniza que amasaba la madre. Los hermanos pequeños, sucios y andrajosos. El padre arriero.Viajes de guanacos,cabras, alpacas ,llamas que transumaban por los pocos pastos que crecìan en las alturas de Los Andes.
El viento calaba los huesos en invierno y la nieve se hacìa espesa como un manto que no era bien venido, entonces la vida transcurrìa solo dentro de casa y los pequeños pasaban las horas entre los desayunos con leche de cabra, panes calientes cocidos entre los carbones del fuego y arropados con las pocas frazadas y pieles que curtìan despuès de haber faenado una animal para la sopa y el sustento, algunos juegos infantiles y por sobre todo trabajo constante y cansador; porque debìan hacerse hombres.
Prudencio, el mayor era el brazo derecho de su padre. Caminaban horas y dìas por los desfiladeros y faldas del cerro, para llevar pastar los animales en esas regiones en donde el Planeta, se habìa ensañado en hacerles màs difìciles las cosas. A trote de mulas y unos cuantos caballos, los hombres de la pampa andina desplegaban todas sus fuerzas y energìas, para llevar a los rebaños arriba por unos meses en que duraba el pastoreo.
Las madres con los chiquillos quedaban cuidando la casa, realizando las tareas domèsticas y esperando a sus hombres para retomar la vida marital ,desenvolvièndose aguerridamente en esas horas inhòspitas en donde la luz solar pasa rotando los contornos de la tierra y en donde los hielos y los vientos muestras su cara màs indòmita.
Todo eso recordaba Prudencio en una mezcla de lejanìa y presente, que se le venìa como una nube encima de la cabeza y ya no distinguìa si el tiempo se habìa quedado dormido o habìa galopado a trote de jamelgo triste y dolido.
La Mina lo habìa atrapado con una suerte de misterio y maravilla. Los hombres jòvenes, casi niños, seguìan caminando por entre los filones y vetas de las entrañas de la tierra, desgastando la corteza en busca del tan preciado metal que salìa con esfuerzo de palas y picotas en las manos sudadas y siempre rotas de los pirquineros.
Habìa en los piques un embrujo como de mujer. Se sentìan subyugados en ese terreno oscuro y solitario.Las sombras les hablaban al oìdo. Eran valientes, se sentìan valientes. Derrotaban todos los augurios y miedos de las pobres mujeres que calladas sufrìan la angustia de si sus compañeros irìan a ver la luz del dìa.
Siempre corroìa al acecho el miedo. Que se cayeran los maderos  y la fuerza subterrànea se tragara a unos cinco mineros, como habìa sido siempre...como seguirìa siendo siempre.
Dìas enteros, turnos de muchas horas en el asfixiante espacio en donde apenas agachados se movìan para robarle a la mina el metal,èsta a veces se empeñaba en mostrarles una cara siniestra y desalmada, pero los hombres fuertes y llenos de convicciòn por el pedazo de pan, la familia, los hijos...trabajaban
A veces sumbaban pueblos extraordinarios en sus mentes , oìdos y corazòn.Tierras tan lejanas como exòticas.Imaginaban trepar por las olas como veleros y carabelas, montar en pegasos alados, recorrer hielos de cristal, subir al cielo en busca de una nube azul...cualquier cosa, para pasar los momentos monòtonos e infinitos del claustro en la negrura,en la ceguera,  en el vientre de la tierra.
Todo se habìa quedado ahì para Prudencio, guardado en el subconciente de sus horas y sus dìas. Era una mezcla, una amalgama turbia de sensaciones y experiencias compartidas con sus amigos y familia ;enterradas en el olvido que florecìa a veces, pues ya no habìa nada màs que hacer o que pensar, sentado en la entrada de su pobre choza con el bastòn, las manos cruzadas y la mirada perdida en ese cielo de colores que segùn las horas de luz, se vestìa a su antojo.
Sin embargo,habìa tenido buenas historias, historias buenas de trajes, encantos y perfume de mujer en las venas de hombre joven y bien plantado, amèn de un rostro luminoso que brillaba como un sol con esa risa magnìfica de dientes blancos y parejos.
Sentìa el canto de algùn ave en la despojada pradera, unos patos volando hacia el humedal de las alturas y la brisa que doblaba los largos pastos de la soledad.
¡ Cuànto tiempo habìa pasado !
Una larga lista de acontecimientos buenos y malos, caminaban por los pelos de su barba enblanquecida. Y ahora estaba solo y ausente de todo, de la vida, del movimiento de la ciudad, entrometido en la apergaminada superficie del desierto, moliendo las penas, atesorando las alegrìas, en el hilo de humo que subìa desde su boca al sol claro de la mañana.
Unos arrieros lo encontraron tendido,magro, enjuto dentro de la ropa de su cadàver, con las manos siempre cruzadas, la mirada gris y apagada. Tres perros sentados a su costado lamìan sus sienes.
La noche se hacìa lenta y oscura, el viento dejò de silvar sobre la pampa.



Con Derechos de Autor.Inscrito en Santiago de Chile.-